Portugal es un país
que me agrada mucho, lo he visitado varias veces y siempre traigo recuerdos
bonitos de una feliz estancia. Creo que es algo que no he dicho nunca, o
quizás lo haya expresado de pasada en algún ámbito muy reducido, ¿no?
El portugués suele ser
una persona exquisitamente educada y cortés y, desde luego, espera que se le
trate de la misma manera, algo que los españoles no siempre solemos hacer.
Nuestros vecinos
respetan mucho las formas en el trato y las fórmulas en el tratamiento y lo
hacen con notable suavidad y delicadeza. Ellos tienen ─o me parece a mí─ tres
niveles de tratamiento básicos: el «tuteo», que, afortunadamente, está mucho
menos extendido que en España y que se usa apenas entre jóvenes o entre amigos
íntimos.
El término «você», es
el punto de encuentro entre una confianza acotada y una cortesía debilitada por
el trato cotidiano (entre compañeros de trabajo, por ejemplo), y, por último,
el trato de mayor cortesía, usado con todo extraño, superior o persona de
respeto, y cuya base es: «o senhor/a senhora» (el señor/la señora) poniendo el
verbo en tercera persona. Quedaremos a la altura de las circunstancias si
utilizamos esa forma, o bien, si nos resulta difícil, podemos siempre recurrir a nuestro pronombre de cortesía "usted", que todos los portugueses entienden y lo agradecen.
Frecuentemente me
asombro de lo cerca que está Portugal y de lo lejos que lo tenemos.
Boa noite. Muito obrigado
pela leitura.
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